La Corporación
Fernando González le
dará vida a Otraparte

Una naciente corporación y un ambicioso proyecto para darle vida al terreno que alberga la Casa Museo Otraparte son dos ideas que permitirán mantener la casa abierta, funcionando y al servicio de la comunidad.

Por Ana Isabel Rivera

«Recuerdo que de las cosas que más me gustaban era ir a ordeñar con mi abuelo por las mañanas, en donde yo le ayudaba a picar el pasto y a limpiar la pesebrera. También recuerdo que con él recorría la finca y allí aprendí el nombre de los árboles, la clasificación de las hojas, las semillas monocotiledóneas y las dicotiledóneas, y, en fin, me compenetré tanto en esas enseñanzas que hoy por ejemplo sería capaz de ubicar casi todos los árboles que había sembrados en Otraparte. Recuerdo también que me mandaba a colocarles frutas a los cebaderos de pájaros y a espantar los pájaros bobos que les sacaban los huevos a los cucaracheros de sus nidos. Te cuento esto porque me parece que hay que crear una dinámica que permita que la casa de Fernando González esté llena de actividades, especialmente para los niños que continuarán su pensamiento».

Este aparte, un poco privado, de una carta enviada por Lucas González Flórez —nieto mayor de Fernando González, el Brujo de Otraparte— al tío Simón González Restrepo, habla del sueño de convertir al espacio que hoy es Otraparte en un gran centro de actividades, no sólo académicas sino también ecológicas y culturales.

Pero las cosas empiezan a parecer, más que un sueño, una realidad, y son hoy el soporte de la Corporación Fernando González – Otraparte, cuya presentación en sociedad será el 18 de febrero. La corporación pretende preservar y mantener la obra del «Brujo de Otraparte» y convertir el espacio que habitó en un sitio de confluencia de actividades culturales, académicas, ecológicas y, lo principal, mantener la casa abierta al servicio de la comunidad y como un símbolo de lo que fue el filósofo envigadeño.

Una idea

El sueño del «Aprendiz de Brujo», como se hace llamar Lucas González Flórez, viene de más o menos un año atrás, luego de la muerte de su tío Fernando González Restrepo. La familia quería que se continuara la preservación de la obra del filósofo, pero a su vez pensaba que la casa debía permanecer abierta para la comunidad. Por eso se pensó en la creación de la corporación, para cuya puesta en marcha la familia aportará la obra y los derechos de autor y Gustavo Restrepo Villa pondrá al servicio de la organización la página web elaborada por él sobre el autor envigadeño y que ganó recientemente en Bogotá el Premio a la Mejor Página Web Personal (Otraparte.org) otorgado por la Cámara Colombiana de Informática y Telecomunicaciones. El Municipio de Envigado, por su parte, y con mediación del presidente del Concejo —Víctor Yepes— aprobó la entrega en comodato de la Casa Museo Otraparte para los fines de la corporación y se comprometió con el pago de un director ejecutivo, cargo que la organización le entregó a Gustavo Restrepo Villa.

Muchas actividades

Según los estatutos, la Corporación Fernando González – Otraparte funcionará como una corporación sin ánimo de lucro encaminada a congregar a los sectores público y privado, las universidades, los centros de estudio y las personas que quieran contribuir a los objetivos de la organización. Uno de ellos es convertir a Envigado en una ciudad cuna de la producción literaria y filosófica del Valle del Aburrá.

Así mismo, realizará talleres y conferencias sobre la obra de Fernando González y en los que participe la comunidad; conferencias y talleres con estudiantes; encuentros, foros, paneles y seminarios sobre literatura, filosofía, humanidades, ecología y ciencias sociales; talleres de lectura para niños y jóvenes; exposiciones de fotografía y pintura; proyección de películas y videos; publicación de textos y actividades ecológicas.

Un parque-sueño

La corporación ya tiene un proyecto muy claro sobre lo que quiere para el terreno de la casa y otro adyacente, en forma de triángulo, que ya tiene sus usos congelados y que podría anexarse si el Municipio lo adquiere.

La idea tiene, incluso, diseños, y se trata de un gran parque con espacios para la cultura, pero también para la ecología. Se plantea la utilización del terreno como un lugar donde se enfaticen los elementos tierra, agua y aire y que con este espacio sean los niños los habitantes naturales del lugar, que convoque y que no sea sólo el lugar al que llegan los menores «llevados por su maestra para poder hacer una tarea y entran como si se les fuera a aparecer el espanto de Fernando González», tal como Lucas González lo señala en su carta a Simón González.

No se sabe cuánto vale ese parque, pero los gestores de la corporación creen que pueden sacarlo adelante y esa será una de sus metas.

Por ahora habrá que esperar la lista de actividades y que la casa vuelva a estar a disposición del público, con el impulso que le dará esta corporación.

Fuente:

Periódico El Envigadeño, febrero de 2002.