Presentación

Párrafos de aire

Primera antología del
poema en prosa colombiano

1.° de diciembre de 2011

“Párrafos de aire - Primera antología del poema en prosa colombiano” - Estudio introductorio y selección por Fredy Yezzed

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“Párrafos de aire – Primera antología del poema en prosa colombiano” viene a cubrir una deuda que los ámbitos académico y editorial tienen con un género cuya presencia en nuestras letras es de vieja data, pero que no ha recibido la atención debida, lo que se constata en la escasez de estudios dedicados a su análisis crítico y antológico.

La exhaustividad en cuanto a los autores incluidos es el principal criterio del presente trabajo. En consecuencia, éste abarca un período que se extiende desde el momento en que el género surge en el país hasta la actualidad, y reúne un total de treinta y seis poetas, de los que se compilan cerca de doscientos veinte textos de muy disímil factura y tendencia.

Por su parte, el estudio introductorio le proporciona al lector claridades esenciales sobre esta particular forma de escritura, considerada una de las más innovadoras de la expresión poética de los siglos XIX y XX, y cultivada, en nuestro medio, por los más destacados poetas, tales como José Asunción Silva, Luis Vidales, Jorge Zalamea, Eduardo Carranza, León de Greiff, Álvaro Mutis, Rafael Maya, Héctor Rojas Herazo y Juan Manuel Roca.

“Párrafos de aire” sirve tanto a propósitos académicos, de análisis e ilustración sobre el género, como a fines de disfrute estético.

Con la participación de Gabriel Jaime Franco, Jaime Jaramillo Escobar (X-504) y Pablo Montoya.

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Fredy Yezzed López Barón (Bogotá, 1979) es licenciado en Lenguas Modernas de la Universidad de La Salle y profesional en Estudios Literarios de la Pontificia Universidad Javeriana. Su primer libro de poesía, La sal de la locura, conjunto de cincuenta y cuatro poemas en prosa, fue merecedor del Premio Nacional de Poesía Macedonio Fernández (Argentina, 2010), y su libro El diario inédito del filósofo vienés Ludwig Wittgenstein recibió mención honorífica en el Premio Nacional de Literatura – Poesía del Ministerio de Cultura de Colombia (2007). Ha obtenido además los siguientes reconocimientos: XII Premio Nacional Universitario de Cuento Universidad Externado de Colombia (2001), Premio Nacional de Cuento Ciudad de Bogotá (2003), Premio Nacional Poesía Capital (2005) y XXVII Concurso Nacional Metropolitano de Cuento, Universidad Metropolitana de Barranquilla (2006).

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Editorial Universidad de Antioquia

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Gabriel Jaime Franco

(Medellín, 1956)

Gabriel Jaime Franco

Es miembro del consejo de redacción de la revista Prometeo y del comité de dirección del Festival Internacional de Poesía de Medellín. Su libro Reaprendizaje del alfabeto fue Premio Nacional de Poesía Fuego en las Palabras (1996). En 1998 obtuvo la Beca Nacional de Colcultura, con el proyecto Las voces escindidas; y en 2005 fue ganador del concurso de apoyos a la creación artística de la Alcaldía de Medellín con el proyecto Diario del incierto. Su poemario más reciente es La tierra memorable (2006).

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Apaleado

Apaleado. Decididamente apaleado. De naufragio en naufragio. Torpe ciego en el dédalo de mis dudas, yo imploraba tan sólo una vieja canción de infancia. A tropezones. Decididamente a tropezones me consumía el tiempo. El equilibrio no era exactamente mi fuerte. A garrotazos. A garrotazos supe que la vida sería larga como una tarde de verano o como el abismo que tienden la poesía y uno que otro beso. (Por los abismos de la poesía supe caer, deslizarme). Yo viví el oficio que imponen la ausencia y los grandes ausentes, y por las noches sentía un frío y un miedo largos, inmensos. Tuve también la visión memorable de una bella mujer cruzando las plazas, un encuentro y la conversación que desataba el hilo de las coincidencias. Tuve y fui todo eso. Otras cosas fui, también. Pero ahora es este cansancio, este vasto y muy temprano cansancio. Y la tristeza de la lluvia traqueteando en los tejados.

De La tierra de la sal
Medellín, 1993

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Jaime Jaramillo Escobar

(Pueblorrico, 1932)

Jaime Jaramillo Escobar

Fue alcalde de Anzá e inspector de Altamira. Trabajó como técnico de computadores y publicista. Perteneció al movimiento nadaísta, donde se dio a conocer con el seudónimo de X-504. Fue reconocido con los galardones Premio Nadaísmo de Poesía (1967), Premio Cote Lamus (1983) y Premio de Poesía Universidad de Antioquia (1983). Sus libros de poesía son Los poemas de la ofensa (1968), Extracto de poesía (1982), Sombrero de ahogado (1984), Poemas de tierra caliente (1985), Selecta (1987), Poemas principales (2000) y Alta tensión (2001).

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Visita de la ballena

He aquí que una ballena ha venido a visitarme.
Desde lejanas regiones del Mar ha venido a visitarme y me saluda con tres surtidores de niebla,
deteniéndose a la entrada de mi cueva para solicitar audiencia.
Acudo a recibir a la ballena (a quien Dios salude) y habiendo entrado ambos en intimidad inmediatamente,
como dos amigos que se conocen desde hace años,
le hablo de mi juventud en una gruta del alto pico del Aconcagua,
y de la salida del sol detrás de mis orejas,
y, dándole palmaditas en su impenetrable piel nos reímos como dos amigos
la ballena, bus de los mares, y yo que recibo su visita a la entrada de mi cueva,
y charlamos hasta el atardecer, descansando sobre el brillante tapiz de las arenas penetradas de luz.
Ella me cuenta lo que ha visto en las profundidades de los océanos,
los náufragos viviendo en los barcos sumergidos y sus extrañas costumbres,
y lo que sucede en el mar durante la noche.
Después de que la ballena ha hecho uso de la palabra según las leyes de la hospitalidad
y de las normas que rigen los actos de los visitantes,
yo comienzo a hablarle de las profundidades de mi alma
y cuando hago una pausa, a la hora del crepúsculo, no me responde.
Entonces la arrastro y la deposito a la orilla del mar para que éste la recoja
y al alba, cuando la marea se retira, la despido con mi mano en alto.
La ballena (a quien Dios respete y salude) se aleja rápidamente mar afuera y va a estrellarse contra el disco del sol que acaba de aparecer en el horizonte.
Dando la espalda a este espectáculo regreso a la cueva para besar los escorpiones de mi angustia,
oh Monstruo que me habéis recluido en este monte a fin de proteger al mundo de mi extraña maldad.

De Poemas de la ofensa
Medellín, 1968

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Pablo Montoya

(Barrancabermeja, 1963)

Pablo Montoya

Realizó estudios de doctorado en Literatura Latinoamericana en la Universidad de la Sorbona (París III). Su pasión por la música ha configurado un núcleo clave en el género del cuento, por el cual es más reconocido en el país. El Consejo Nacional del Libro de Francia le otorgó una beca para escritores extranjeros por su libro Viajeros (1999). Ha publicado las novelas La sed del ojo (2004) y Lejos de Roma (2008). Sus dos títulos más recientes de poesía son Trazos (2007) y Sólo una luz de agua, Francisco y Giotto (2009).

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Américo Vespucio

Entierro la bandera con la cruz y descargo el astrolabio. Estoy ante dos árboles donde hay algo amarrado que los aproxima. Es una manta que forma un lecho suspendido. La mujer sobre él se despereza. Una de sus manos, cubierta de hormigas, la lame un animal de larga lengua. En sus senos mariposas con las alas extendidas. Collares de piedras se anudan a las piernas. Su desnudez expele un olor que embriaga. Me quito el calzado, la capa, el bonete. En el cabello de la mujer los loros se pierden en un revoloteo de gritos. En su otra mano yo intento comprender el lenguaje de esos dedos que hablan. Me acerco. Escucho su voz. Miro su oscuridad, dilatada abajo. Me persigno. Me asomo. La toco. Un tapiz de hierba húmeda me pica y me excita. Trato de hacerla, de moldearla a la forma de mi ansia. Pero ella es una extensión sin nombre que se me escapa. Mis ojos se extravían. Deliro. Veo todo lo grande y lo longevo. Me asusto. En cada rincón palpado, mi mundo se ilumina, se opaca, se derrumba. Mi pensamiento se fragmenta. De lo ínfimo me sumerjo en el silencio. Luego, lloro, lloro mientras de su sexo brota un fuego que no logro apagar. Incapaz de permanecer más dentro de ella, me separo, agotado. La miro acostada en la cama de los lazos. Y comienzo a tratar de descifrar sus secretos desde lejos.

De Viajeros
Medellín, 1999

Fuente:

Párrafos de aire – Primera antología del poema en prosa colombiano. Estudio introductorio y selección por Fredy Yezzed. Editorial Universidad de Antioquia, Colección Poesía, Medellín, 2010.