Presentación

Viajé a pie

—14 de julio de 2022—

Portada del libro «Viajé a pie» de Gustavo Henao Chica

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Ver grabación del evento:

YouTube.com/CasaMuseoOtraparte

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Gustavo Henao Chica (Jericó, Antioquia, 1957) es licenciado en Educación Especial de la Universidad de Antioquia y especialista en Literatura – Producción de Textos e Hipertextos de la Universidad Pontificia Bolivariana. Ejerce como entrenador de personas con limitaciones neuromotrices y como entrenador paralímpico en diversas modalidades deportivas. Ha publicado los libros de cuentos «De la intimidad», «Historias en agua y tierra», «Cuentos para leer en el crepúsculo» y «Coloquios de adolescencia». Así mismo, es autor de los ensayos «Viajé a pie» y «Textos para Afrodita» y de los libros de poesía y teatro, respectivamente, «En busca del asombro» y «Fragmentos alucinados».

Presentación del autor y su obra
por Jesús Antonio Camacho
y Julio Hernán Calle Correa.

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Cada página del libro encantado Viajé a pie la recibo en mi rostro, cuerpo y alma; el sol, la niebla, la lluvia suave, respiro el aroma de los bosques, y en este viaje mis pasos conducen mi mirada a sentir las aguas de los ríos, las piedras, y a cruzar puentes de madera y nubes… Soy una caminante, invisible, curiosa y enamorada de hojear página tras página, y así también comienzo un viaje interior, redescubriéndome con los recuerdos de la infancia, rozados por la nostalgia. Hay, en este viaje, un enfrentamiento de la vida y la muerte, una interacción entre el sueño y la realidad. Poco a poco me siento parte del paisaje: soy un árbol, una flor, un pájaro y la «paleta» en tonalidades de verde de la inmensa colcha de retazos que «viste» las montañas.

Viajé a pie logra entrelazar filosofía, literatura, arte, alegría y amor por la vida. El corazón es un templo lleno de emociones, letras en espejos del alma. Mientras Cronos abre y cierra las puertas de la Vida y de la Muerte con la llave del tiempo, Viajé a pie presenta nueve letras en el título, y el libro bien escrito nos lleva a la meditación y a las reflexiones e inspira el Renacimiento. El número nueve significa el final de un ciclo y el comienzo de otro (en plenitud en la totalidad del ser)…

¡Felicitaciones, Gustavo Henao Chica, felicitaciones a todos los caminantes!

Gracias por el hermoso viaje-aprendizaje.

Vanice Zimerman

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Gustavo Henao Chica

Gustavo Henao Chica

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Octava jornada

Ausencia, hasta dios
salió corriendo

Vereda El Reposo, entre Pácora y Salamina
Cañón del río San Lorenzo
10 de enero de 2017, Salamina-Aránzazu

Volvimos a las imágenes de las casas abandonadas, llenas de soledades y desarraigos obligados, inducidos por el miedo y la muerte, ausencias de sí, ausencias de la tierra, muertes y expropiaciones, ¿quién comprará? El asesino mimético, el silencioso monstruo del poder. Ingresamos a varias de estas casas huérfanas, casas que mueren poco a poco desde que sus habitantes salieron huyendo o murieron atravesados por las balas de la ignominia, sin entender. Los frutales que las rodeaban han muerto, ya no hay a quien dar naranjas, mandarinas, guayabas. Han muerto las rosas del jardín, las dalias y las margaritas, ya no hay quien las riegue en las mañanas, quien les cante mientras quita sus hojas secas. En estas casas de ausencias, de soledades, se conmueve el ser, de cada casa sale uno con el alma llena de desgano, cierra uno los ojos y puede ver a los humildes campesinos humillados, desmembrados, incompletos de familia, corriendo con el miedo hacía la incertidumbre. La maleza comienza a aparecer para ocultar o guardar en sus entrañas la vergüenza. La manigua esconderá estas casas como secretos que a nadie contará.

Llegamos a Salamina, como colgados, caminábamos por las calles; estas son tan inclinadas que la gente, vista desde abajo, parece venirse de bruces. Pensé en el triunfo de los demonios en su poderoso infierno, todos ellos llenos de soberbia, pavoneándose de ser como Dios (tenían reino y vasallos). Retomé un pedazo de papel pergamino que guardo como recuerdo de una de mis heroínas, mi abuela materna Rosa; para su época mujer contestataria: amó y tuvo hijos sin casarse, se recreaba montada en un toro los viernes de feria, se rebuscaba la vida, trabajando en labores del campo y cultivando tabaco. En esos días los celadores (policías) iban a las veredas y se llevaban para la cárcel a quienes traficaban con el tabaco. Ella lo mantenía escondido en el cafetal debajo de unas hojas; cuando la descubrieron y la llevaron a la cárcel, ocho días estuvo presa.

Entre sus pocas pertenencias encontré un ajado y amarillento texto escrito en papel pergamino; transcribo lo que rescaté, pues el original tenía pedazos ilegibles. Hoy voy a transcribir los textos de Salomé, algunos pedazos de texto que se conservan.

Evangelio según María Salomé

Introducción

Los Evangelios Apócrifos que escribió María Salomé después de la muerte de Jesús no se han mencionado. No se sabe con precisión, dónde aparecieron estos manuscritos, y quién se encargó de traducirlos, lo cierto es que son reflexiones sobre temas que los evangelistas no trataron, tampoco tenemos explicaciones sobre las razones que los movieron a dejar en silencio los tres días de Jesús en el infierno.

La condición de sometimiento de la mujer hizo que las discípulas de Jesús con capacidades para difundir la palabra no pudieran hacerlo, o que lo hicieran en forma clandestina, muchas veces utilizando a los hombres como voceros.

Algunas de ellas hacían de consuetas para aquellos apóstoles débiles como Pedro. Esos textos incompletos contienen reflexiones sobre las mujeres que acompañaron a Jesús, y sobre otros temas.

El cristianismo, el Islam que tiene 32 escuelas filosóficas, siendo Whahavies, Salafines, Chafies, Hanbalies, Hanafies, que pertenecen al Sunismo, los más verticales con la mujer y el judaísmo, son tres grandes sistemas religiosos que han promovido el monoteísmo (extrajeron del Zoroastrismo: resurrección, juicio y salvación, son dualistas en tema del bien y el mal).

En estos sistemas se evidencian diversas formas de exclusión para las mujeres y en todos los ámbitos, lo que no sucede con las religiones politeístas donde las mujeres también son diosas, comparten en equidad e igualdad. La caída de estos sistemas será cuando las diosas vuelvan a su lugar y se tomen el trono que les fue arrebatado.

En el cristianismo en particular, se les dio un lugar de súbditas (las vírgenes), lugar por demás ignominioso porque con esa asignación, se les marca el camino del sometimiento, la virginidad como una virtud, y a su cuerpo como algo que no se puede disfrutar.

Estas instituciones (monoteístas-monopolio) han tenido una relación directa con el poder, con quienes mueven los hilos de la economía mundial, y se han atrevido a bautizar sus guerras como santas. Para el caso del cristianismo, Jesús promovió el amor, sabiduría. Nada que ver con el mensaje del antiguo testamento, donde en Números 31 Moisés en nombre de Jehová, manda asesinar tribus completas. (Genocidio).

Evangelio 1 Salomé.

Salomé.1.1 Estábamos conmocionadas, vimos cómo lo bajaron de la cruz, su cuerpo completamente desmadejado, Nos negábamos a aceptar su muerte, verlo así en ese estado de indefensión era como un absurdo, no parecía real; las mujeres nos abrazábamos para darnos fuerza, Juan iba a nuestro lado, los demás discípulos más alejados, todos teníamos miedo, era claro que aquello no terminaría allí.

Salomé.1.2 Cuando ya fue dejado en el sepulcro, oramos mientras cubrían la entrada, nos fuimos a casa de María donde seguimos rogando de rodillas.

Salomé.1.3 Habíamos preparado los aceites e inciensos para llevar al sepulcro, Magdalena guardó en un zurrón que cargaba siempre todas las cosas necesarias, salimos, ya sentíamos el cansancio de estos tres días de oración y ayuno.

Salomé.2.1 Los apóstoles seguían perturbados, la muerte de Jesús, aunque anunciada en la profecía, los dejó con una responsabilidad que ellos no sabían cómo enfrentar, con el maestro a su lado sentían confianza, no albergaban miedo porque desde que se unieron a él nadie los agredió; bien diferentes serían las cosas ahora, los enemigos del maestro sabiéndolo muerto seguro intentarían asesinar a sus seguidores. Por demás algunos no estaban muy convencidos de aquella divinidad del maestro, muerto de igual forma que los asesinos.

Salomé.2.2. Llegamos al sitio donde fue sepultado Jesús, la enorme roca que cubría la entrada estaba corrida, lo suficiente para que entrara o saliera un ser humano. En el primer momento pensamos que fanáticos lo habían sacado para hacer quién sabe qué, pero no fue por mucho, se cumplía lo profético, ¡él estaba vivo!

Salomé.2.3 Por los apóstoles que nos acompañaron, supe que se estaban reuniendo a escondidas en pequeños grupos. Me fue embargando una sensación de alegría, presentía que le veríamos pronto, me imaginaba ese esplendor de vida, ese poder ante la muerte. El regocijo estaba en mí, lo tenían todas, me percaté de eso cuando las miré.

Salomé.2.4. Nuestra alegría fue sublime cuando logramos verlo aparecer, etéreo, pero real. Escuchamos su voz pausada, afirmando que la profecía se había cumplido. Y bendiciendo lo que desde ese día sería nuestro apostolado … predicar su palabra…

Salomé.2.5. Escuchamos su palabra y su visión del infierno, entendí que solo en el cielo hay gloria. Que el infierno, solo es la ausencia del otro, el vacío, …

(Se borró lo que seguía)

Salomé.4.1. Las mujeres nos juntamos en un lado de la cueva, otro tanto hicieron los hombres. Ya no llorábamos, vimos claro en nuestro ser su resurrección, el discernimiento nos iluminó.

Salomé.4.2. Id y predicad en nombre del señor. Esa instrucción era para todos, hombres y mujeres, pero mirando a Pedro y Pablo sentimos la resistencia.

MUERTE DE JESÚS

Mt. 27:45-56; Jn.15:33-41; Jn.19:28-30

– ¡Padre en tus manos encomiendo mi espíritu!

Y al decir esto, murió. Su alma emprende el descenso a los infiernos.

Jesús expiró.

JESUS EN EL INFIERNO

Salomé.4.3 En el infierno no existe el tiempo, ni el espacio. No hay pasado, ni futuro o presente. Todo es quieto, en la misma dimensión. Allí solo existe la masa caótica de los seres que son todos del mal. No hay alegría, solo mentira, odio, egoísmo, envidia. Lástima. Allí están los demonios flotando en esa atmósfera indescifrable, no se sienten los unos a los otros, no se ven, no se oyen. Esos demonios no deambulan, están siempre, están en sí mismos como suspendidos, no son en relación a otros, son en sí.

Salome.4.4. En el infierno no va la mirada del otro, porque allí no existe la posibilidad de otros, se es solo, que es un castigo, el mayor castigo, se es solo para no tener la posibilidad de compararse, no se pueden establecer jerarquías. Los demonios son únicos. El infierno donde unos demonios son más poderosos que otros, es un infierno literario, poético, estos demonios llegan a ser comparados por hombres con los dioses. Estos demonios podrían presumir de tener adeptos, podrían atribuirse cualidades de dioses, pero los demonios en sí mismos son inconscientes, son los hombres y mujeres los que al dejarlos manifestarse a través de ellos les asignan una dignidad y un poder.

Salome. 4.5. Ningún demonio es o tiene la voluntad, el saber para sentirse mejor, no pueden expresarse notablemente entre los hombres y mujeres, son estos quienes los maximizan. Solo a través de los hombres y las mujeres los demonios se

reconocen, son los hombres y mujeres que se dejan poseer y se dedican a su culto.

Salome.4.6. Esa dimensión de demonio con más o menos poder, con más o menos grandeza o jerarquía se la ha dado el hombre y la mujer. Esos atributos dependen de las sociedades, de las culturas, pero los demonios no lo saben porque no tienen ese don, los demonios no pueden discernir porque si así fuera se aproximarían a los dioses. Por eso cuando la luz blanca, la atmósfera resplandeciente de Jesús baja al infierno, no es percibida, Jesús etéreo de paso por el infierno es en sí mismo, pero él si puede, esto sin ser tocado, ver aquel ambiente infesto por los demonios, que podrían cruzarse sin sentirse, sin olerse, sin pensarse, llenos de incertidumbre, de malestar, de dolor, de insatisfacción. Salomé. 4.7. (aquí se borra el total del texto).