El Café de Otraparte es un espacio para la experiencia compartida. Instalado en el epicentro de un territorio patrimonial de interés cultural, rodeado de naturaleza y como extensión viva de la Casa Museo que lo hospeda y abraza en una atmósfera rodeada de árboles y memoria. Aquí las palabras encuentran mesa y el tiempo toma otro ritmo, sincronizándose con el pulso de las presencias que lo visitan. 

Su oferta gastronómica es mezcla de sabores intensos y suaves que son una invitación a quedarse, a habitar y extender el momento, a acompañar el silencio o la conversación y a convertir lo cotidiano en significativo. Aquí tienen cabida las diversas formas de estar juntos: familias, amigos, parejas, solitarios que celebran, comparten, crean, construyen y se descubren en un espacio – refugio para quienes hacen del alimento y la bebida un ritual y dotar de un sentido un encuentro, coleccionarlo y hacerlo memorable.

De esta manera, El Café de Otraparte es el lugar para paladear y para acoger la vida plural, compartida, íntima, festiva o contemplativa. Un espacio que no se impone, invita a permanecer en donde la hospitalidad no es un protocolo, sino un acto poético. Es, en definitiva, un lugar para quedarse.

«¿Se dan cuenta de lo que saben? Saber es una cosa y darse cuenta de ello, otra».

El Maestro de escuela.